Algunos lo definen como “el paseante”. Se trata de una pequeña barracuda, nacida de la necesidad de unos spinners que buscaban un depredador que, en su etapa de alevín, es un auténtico manjar para toda clase de depredadores. Concebido para atrapar peces trofeo, Espetrón se mostró desde el primer momento como un señuelo especial que marca diferencias. Si persigues a los grandes cazadores de agua salada, Espetrón no puede faltar en tu caja.
Algunos lo definen como “el paseante”. Se trata de una pequeña barracuda, nacida de la necesidad de unos spinners que buscaban un depredador que, en su etapa de alevín, es un auténtico manjar para toda clase de depredadores. Concebido para atrapar peces trofeo, Espetrón se mostró desde el primer momento como un señuelo especial que marca diferencias. Si persigues a los grandes cazadores de agua salada, Espetrón no puede faltar en tu caja.
Amor a primera vista
Espetrón muestra su potencial en cualquier condición: ya sea en aguas planas y cristalinas, en días de marejada o en aguas oscuras, esta pequeña maravilla es una apuesta segura. Su historia así lo confirma: en pequeñas reuniones de spinners experimentados, Espetrón conseguía siempre las mejores piezas. En dos ediciones del Open de Spinning en el Delta del Ebro, nuevamente Espetrón engañó a los animales más grandes, permitiendo a sus dueños alzarse con el premio a la pieza mayor. Y todo ello pescando en superficie, superando a señuelos hundidos -a priori- más eficaces. Quien confía en Espetrón y prueba su eficacia, queda enganchado para toda la vida por los inolvidables ataques que proporciona, y desde ese día sabe que afrontar una jornada de pesca en superficie sin él es ir a la batalla desarmado.
El tamaño importa
Al ver su tamaño, muchos pescadores opinan que un señuelo tan grande no les va a funcionar en sus pesqueros habituales… pero se equivocan completamente, pues una lubina de apenas un kilo no tiene ningún reparo en engullir un bebé de barracuda de 20 cm. Es cierto que Espetrón fue diseñado para anjovas y palometones del Mediterráneo, pero nuestros amigos del Cantábrico -que normalmente optan por muestras de 9 a 12 cm- hablan maravillas de él, hasta el punto de comprobar cómo, pescando en superficie, Espetrón puede ser notablemente más eficaz que sus señuelos habituales. Ellos fueron los primeros en bautizarlo como “el paseante”, un arma mortífera de superficie con acción walk the dog que mantiene el 80% de su cuerpo permanentemente bajo la superficie, mostrándose así como una presa mucho más atractiva y vulnerable a ojos de los depredadores. Su sinuoso movimiento activa el instinto depredador de lubinas, anjovas, llampugas, serviolas, palometones, atunes, espetones y otras especies que no dudarán en llevarse este magnífico señuelo a la boca. Nuestro gran amigo Antonio Varcasia da prueba de ello en escenarios lejanos, donde Espetrón desplegó todo su poder de seducción de la misma manera que ya había seducido a los pescadores locales. Si Espetrón te premia con peces especiales, es porque es un señuelo especial.
Longitud: 20 cm
Peso: 38 g
Ficha de datos
- Producto
- Señuelo
- Modalidad
- Spinning
- Tipo cebo
- Paseante Pencil
Referencias específicas
- ean13
- 8433570051073